La localidad de Siete Palmas atraviesa una vez más un escenario de aislamiento total debido a la intransitabilidad de sus accesos. Ni por la Ruta Provincial N° 4 ni por la N° 8 es posible llegar desde la Ruta Provincial N° 2, a pesar de que en la zona solo se registraron 15 milímetros de lluvia este martes. Esta situación desnuda la falta de inversión en infraestructura y la responsabilidad directa del Gobierno provincial, que durante años viene prometiendo la pavimentación de la Ruta Provincial N° 8 desde La Primavera sin avances concretos.
Las consecuencias de este abandono son graves: docentes deben trasladarse en acoplados de tractores para poder llegar a las escuelas, mientras que estudiantes que cursan en Laguna Blanca y localidades vecinas no pueden asistir a clases, vulnerando el derecho básico a la educación. Un video difundido por vecinos muestra con crudeza la magnitud del problema: una ambulancia y un transporte de alimentos quedaron empantanados en uno de los tramos de acceso, reflejando el riesgo que enfrentan servicios esenciales.
A estas dificultades se suman los problemas de proveedores comerciales y de la empresa de transporte de caudales que no logran garantizar el tránsito seguro. La falta de respuestas y la postergación de obras estratégicas confirman la desidia oficial, dejando a Siete Palmas y a sus habitantes atrapados en un aislamiento que se repite año tras año. Lo ocurrido no es producto de la casualidad, sino consecuencia directa de la indiferencia del Gobierno provincial, que acumula promesas de pavimento sin cumplir y mantiene a los pueblos del norte formoseño condenados al barro y al olvido.
