Tras un extenso periodo de elevadas temperaturas en gran parte del país, las lluvias empezarán a ganar terreno tras la ruptura del bloqueo atmosférico. El calor comenzará a aflojar y en este informe te contamos desde cuándo.
La última parte del mes de noviembre caracteriza por las elevadas temperaturas y el incremento de humedad para el centro, litoral y norte del país. En las últimas jornadas, abarcando el din de semana se fueron generando algunas tormentas y chaparrones al sur del área pampeana, alcanzando al sudoeste de la provincia de Buenos Aires (puntos de la costa atlántica) y este de la Pampa, siendo evento acotados, pero lejos de la región núcleo.
Si bien este lunes las lluvias se mantendrán ausentes de la mayor parte del centro, región núcleo y norte del país. Sólo se estarán presentando eventos locales de chaparrones y tormentas al norte de Río Negro, sur de la Pampa y sudoeste de la provincia de Buenos Aires. Al mismo tiempo la nubosidad estará en aumento para Cuyo y noroeste del país, donde estarán evolucionando chaparrones locales, pero con rápido mejoramiento.
Para el miércoles 30: el mes finalizará con el cambio de viento, mediante el paso de un frontal frío, lo que promoverá a la evolución de tormentas y chaparrones sobre las provincias de Buenos Aires, La Pampa, Córdoba, San Luis y La Rioja. Inclusive alcanzando el sur de Santa Fe y Entre Ríos.
Sobre el noroeste del país también estarán evolucionando tormentas locales, en el caso de la zona central de las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán y Catamarca.
Para el tramo final de la semana, durante el jueves 1° de diciembre, se espera que se mantengan algunas lluvias sobre el centro y norte del país, abarcando al litoral, incluso con el desarrollo de tormentas. El tiempo mejorando en la jornada, con disminución de la nubosidad, dando lugar a un viernes mucho más estable.
El fenómeno de la niña sigue influenciando las precipitaciones
Si bien las lluvias ya son algo más frecuentes y de cobertura, los próximos meses van a continuar siendo influenciados por el fenómeno de La Niña, por lo cual las lluvias se verán condicionadas, por lo que se seguirán presentando por debajo de lo normal para muchas regiones del país. Según los últimos informes, por el momento no hay cambios significativo en los pronósticos sobre este evento, incluso los últimos informes estiman que se extendería hasta el mes de febrero, aunque con un 50% de intensidad. Lo cierto es que desde hace 14 meses y algo más las lluvias fueron de baja frecuencia y cobertura, con acumulados por debajo de lo normal, esto hace tambalear a las principales regiones productoras al del país, con un patrón seco que se continúa afianzando y las pérdidas de cosechas que son cada vez mayores.
Si hacemos una evaluación de los régimen de lluvia de los últimos meses, en septiembre y octubre se afianzó la sequía en gran parte de la región núcleo, a pesar de haberse dado algunos eventos puntuales de precipitaciones, no alcanzaron.
Los acumulado de precipitación fueron deficitarios en la zona núcleo entre 2020 y 2022, que según el registro es más bajo que en 2007 y 2009, una de las más intensas sequías que haya afectado a la región.
Según los últimos informes y análisis de suelo, la disponibilidad de humedad es muy precaria, lo que indica una sequía de nivel extremo, sumado a la exigencia térmica de la temporada, la evaporación es mucho mayor, sobre todo al norte de Buenos Aires y sur de Santa Fe.
El panorama sigue siendo incierto y las condición actual de los cultivos tanto extensivos como intensivos, en el norte de Buenos Aires se encuentra afectada, de manera tal que se esperan rendimientos muy por debajo del promedio histórico, e incluso pérdidas totales y reducción del área sembrada, según la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías.
Con información de: https://news.agrofy.com.ar/
