Más de 150 empresas tendrán menos costos burocráticos para fabricar e importar electrodomésticos y así podrán bajar sus precios.
El Gobierno nacional, por medio de la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía, simplificó los trámites que los importadores y fabricantes de electrodomésticos deben realizar para poder comercializar sus productos. De esta manera, los artículos de hogar tendrán menos regulaciones y se espera que sus precios comiencen a bajar, además de la reducción del Impuesto PAIS ya anunciada por La Libertad Avanza.
Hasta ahora, las empresas debían ensayar en el país los productos para corroborar el nivel de eficiencia energética, que mide el rendimiento y el consumo de los mismos. Además, debían enfrentar un proceso de certificación que incluía una auditoría en planta realizada en forma anual, inclusive si se trataba de fábricas en el exterior. Sumado a esto, las empresas tramitaban en la Secretaría de Industria y Comercio un permiso de comercialización que las importadoras luego debían presentar en la Aduana para liberar la mercadería.
A partir de una Resolución que se publicará la próxima madrugada en el Boletín Oficial, se modificará el reglamento técnico de eficiencia energética. Ya no será necesario un trámite de autorización en la Secretaría de Industria y Comercio, una verificación por parte de la Aduana previo a la comercialización ni una certificación obligatoria. Cumpliendo con las condiciones requeridas y suscribiendo una declaración jurada, las empresas podrán ofrecer sus productos en el mercado.
Esto permitirá bajar los costos de la burocracia con la que cargan las más de 150 empresas del sector que importan y fabrican. La medida redundará en una mayor oferta de productos, mayor competencia, con la consecuente baja de precios. Sin embargo, esta no es la única medida de parte del Gobierno nacional para fomentar al consumo interno
En las últimas semanas, Javier Milei y Luis Caputo, ministro de Economía, iniciaron un proceso de desregulación de importaciones de productos. Desde diciembre, se ampliará el límite de pequeños envíos desde el exterior vía courier a USD 3.000 y aplicará una baja de aranceles para las importaciones de esos artículos, con una franquicia de USD 400, que deberán ser destinados a uso personal.
Esta medida lo que genera es una competencia constante entre los productos producidos en el país a los importados, los cuales con esta traba impositiva generaban que se encarezcan de manera considerable. Ahora, compiten casi a la par y la gente elegirá por qué opción se inclina, teniendo en cuenta que los mismos artículos pueden llegar a valer hasta tres veces más una vez que cruzan la Aduana. (elintransigente.com)