Ayer inició el solsticio de verano y con él, ahora los días son más largos. Respecto al fenómeno, el observador meteorológico formoseño Milton Miszczuk, que se encuentra prestando servicio en la Base Antártica San Martín, comentó a La Mañana que en el continente blanco, el Sol está presente las 24 horas.
“Es una experiencia super extraña, hace varios días no vemos las estrellas, pero en particular desde ayer el sol gira alrededor nuestro, es como una corona sobre nosotros”, dijo Miszczuk.
Por otra parte, explicó que este suceso manifiesta ciertas incidencias en el cuerpo: “En particular a mí me cuesta conciliar el sueño, es agotador; eso hace que la memoria sea lenta y esté como distraído”, sostuvo.
En el hemisferio Sur el Sol consigue su mayor altura en el cielo haciendo que la duración del día sea más larga y de la noche, más corta. Sin embargo, en el continente antártico, la noche no hace presente, ya que el día dura 24 horas. (LA MAÑANA)
