. La comunicación fue confirmada por el vocero Manuel Adorni.
. Fue el primer contacto entre ambos, a una semana del triunfo del magnate en las elecciones de los Estados Unidos.
El llamado se hizo esperar. Es que primero llegó la confirmación de un encuentro informal el jueves en Miami. Pero finalmente este martes Javier Milei logró hablar telefónicamente con Donald Trump para felicitarlo por ser elegido nuevamente presidente de los Estados Unidos en las elecciones realizadas hace una semana, en la que el republicano se impuso a la demócrata Kamala Harris.
La comunicación telefónica, que se extendió durante unos 10 minutos, puso fin a varias intrigas y especulaciones sobre la demora en el contacto entre el Presidente y el mandatario electo norteamericano. Fue el vocero Manuel Adorni quien pasado el mediodía de este martes confirmó la charla a través de sus redes sociales.
«El Presidente de la Nación Javier Milei mantuvo una conversación telefónica con el Presidente electo de los Estados Unidos Donald Trump. Fin», posteó el portavoz en su perfil de X. Luego, en un segundo mensaje, aseguró que el millonario empresario elogió al líder libertario y le dijo: “Usted es mi presidente favorito”.
Desde la semana pasada el traductor presidencial, Walter Kerr, estuvo pendiente de la eventual comunicación y desde el lunes todas las reuniones del mandatario estaban sujetas a cancelación ante la posibilidad que se coordinara un llamado desde Washington, el cual finalmente se demoró casi una semana.
El miércoles pasado Milei se había puesto a disposición del electo mandatario en un posteo en X. Luego, volvió a grabarle un mensaje en TikTok el jueves. “Felicito al presidente electo Donald Trump por la gran victoria en las elecciones celebradas en el día de ayer. Usted sabe que puede contar con la Argentina para hacer grande a Estados Unidos nuevamente”, remarcó.
Más allá de la tardía salutación, tal como contó Clarín, el jefe de Estado tiene la convicción de que es importante viajar a los Estados Unidos antes de la asunción de Trump prevista para enero próximo. Por eso este jueves arribará a Miami con la excusa de participar de una cumbre liberal y con la expectativa de mantener una bilateral y avanzar en una alianza estratégica en la residencia que el magnate tiene en la vecina Palm Beach.
En Casa Rosada consideran que, por la cercanía ideológica que los une y la distancia que el estadounidense puede tener con el brasileño Luiz Inácio “Lula” Da Silva, el Presidente se puede erigir como su referente regional. De todos modos, la región no es prioridad para la futura administración que tendría a la disputa comercial con China y los esfuerzos para terminar la guerra entre Ucrania y Rusia como sus principales objetivos.
Lo cierto es que Milei viajará en vuelo privado a Estados Unidos a la espera del regreso al país del avión presidencial ARG 01 -que casualmente es sometido a un riguroso chequeo en un taller de Miami- previsto para los primeros días de diciembre. Así, entre jueves y viernes próximo el mandatario participará de una nueva ronda de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC), en Palm Beach, donde Trump tiene su residencia. En Casa Rosada insisten en que ambos líderes libertarios «se van a ver», pero que resta definir bajo qué escenario.
En el oficialismo festejaron el triunfo del magnate en los comicios norteamericanos e incluso arriesgan que significará un espaldarazo al modelo que impuso el libertario en la Argentina y que, con audacia, sugieren podría exportar a Estados Unidos vía los «consejos» del «coloso» Federico Sturzenegger a Elon Musk, que posiblemente lidere las políticas de desregulación de la futura administración.. «Estamos exportando el modelo de la motosierra y la desregulación a todo el mundo. Estamos cambiando el mundo, haciendo uno más libre», dijo el Presidente en un reciente discurso.
La manifiesta amistad de Milei con Musk, con quien se reunió ya varias veces, es el puente que quiere utilizar para congraciarse con Trump. Entre los objetivos del Gobierno nacional se encuentra la posibilidad de un trato más favorable del FMI hacia la Argentina, que permita una salida rápida del cepo cambiario. (clarin.com)