Los padres tienen un papel fundamental para prevenir y ayudar a sus hijos a superar el problema del consumo de drogas, pero muchas veces no saben cómo hacerlo. De ello dependerá en gran medida su ayuda. El artículo propone brindar algunos consejos tanto para detectar señales del consumo y como poder responder a tiempo.
El consumo de drogas es un problema que afecta a muchos jóvenes y que puede tener graves consecuencias para su salud, su desarrollo y su futuro.
En muchos de los casos, las presiones de los amigos, los contextos, y los medios de información contribuyen a un profundo desconcierto de no saber cómo actuar al respecto. Y cuando el consumo de drogas devino en un habito, el problema ya está instalado. De poder detectar este problema a tiempo, es clave, para favorecer su pronóstico de su tratamiento.
Algunas señales para identificar el consumo drogas en los hijos son:
Cambios repentinos o drásticos en las amistades, los hábitos alimenticios, los patrones de sueño, la apariencia física, los pedidos de dinero, la coordinación o el desempeño escolar.
Pérdida de interés por las actividades que antes le gustaban, como el deporte, la música o el arte.
Aislamiento, irritabilidad, depresión, ansiedad o agresividad.
Mentiras, robos, secretismo o problemas con la ley.
Olores extraños en la ropa, el cuerpo o el aliento.
Presencia de parafernalia relacionada con las drogas, como pipas, jeringas, papel de aluminio o bolsitas con polvo o hierba.
Signos físicos que dependen del tipo de droga que se consume. Por ejemplo3:
Ojos y mejillas rojos o dificultad para concentrarse: consumo de alcohol
Ojos rojos y pupilas reducidas: consumo de marihuana
Quemadura extraña en la boca o los dedos: fumar algo (posiblemente heroína) mediante una pipa de metal o de vidrio
Hemorragias nasales crónicas: consumo de cocaína
¿Qué hacer si mi hijo se droga?
Se presentan algunos consejos prácticos para enfrentar esta realidad de la mejor manera posible.
El primer consejo es no dejarse llevar por el pánico. El consumo de drogas es un problema serio, pero tiene solución si se trata a tiempo. Los padres deben mantener la calma y no dramatizar ni banalizar la situación. El pánico puede llevar a reacciones desproporcionadas o ineficaces que pueden empeorar el problema o alejar al hijo.
El segundo consejo es afrontar la situación. Los padres deben hablar con su hijo y expresarle su preocupación y su apoyo. Deben ser honestos y decirle por qué creen que consume drogas y qué consecuencias tiene para su salud, su desarrollo y su futuro. Deben evitar negar o evitar el problema, ya que esto puede generar desconfianza o indiferencia en el hijo.
El tercer consejo es actuar con serenidad. Los padres deben evitar enfadarse o gritarle al hijo. Tampoco deben juzgarlo o culparlo. Deben tratar de entender sus motivos y sus sentimientos. Deben escucharlo con atención y respeto. Deben mostrarle su amor y su confianza. La serenidad puede favorecer la comunicación y la colaboración del hijo.
El cuarto consejo es acudir a un profesional. Los padres deben buscar ayuda médica y psicológica para su hijo. El médico le hará una serie de pruebas para determinar el tipo y el grado de consumo de drogas. El psicólogo le ofrecerá orientación y asesoramiento para afrontar la situación de la manera más adecuada posible. También les dará pautas a los padres para ayudar a su hijo desde casa.
El quinto consejo es buscar un centro especializado. Si el hijo consume drogas desde hace tiempo o tiene un nivel de dependencia alto, es probable que necesite un tratamiento más intensivo y específico. Un centro especializado en adicciones puede ofrecerle condiciones de mayor seguridad y control en un ambiente agradable. Allí recibirá atención médica, psicológica y social para su recuperación. Vale aclarar que en Argentina funciona la línea 141, las 24 horas del día desde donde se puede recibir orientación y asesoramiento gratuito al respecto.
En conclusión, estos son algunos consejos para actuar si tu hijo consume drogas. Los padres deben estar atentos a las señales de consumo de drogas en sus hijos y actuar de forma rápida y adecuada para ayudarlos a superar su problema. Los padres deben informarse, comunicarse, apoyarse y buscar ayuda profesional cuando sea necesario. (ambito.com)