Dos de los mayores referentes tecnológicos del mundo advierten sobre una posible crisis energética global. Bill Gates y Elon Musk coinciden en que el sistema eléctrico actual podría colapsar en los próximos años si no se toman medidas urgentes.
En medio de un escenario global cada vez más vulnerable a las crisis energéticas, dos de las mentes más influyentes del siglo XXI —Bill Gates y Elon Musk— han encendido las alarmas. Aunque no se trata de una predicción apocalíptica ni de una teoría conspirativa, ambos empresarios coinciden en algo inquietante: el mundo no está preparado para afrontar un gran apagón eléctrico. Y podría ocurrir antes de lo que imaginamos.
Durante una conferencia reciente sobre innovación tecnológica y sostenibilidad, Bill Gates advirtió que “las redes eléctricas actuales son frágiles, especialmente frente a los nuevos desafíos del cambio climático y los ciberataques”. Según el fundador de Microsoft, muchos países no invierten lo suficiente en modernizar su infraestructura energética, lo que podría derivar en “apagones masivos e intermitencias prolongadas”.
Por su parte, Elon Musk fue aún más categórico: “La demanda energética crecerá de forma exponencial con la inteligencia artificial, los autos eléctricos y la digitalización de todo. Si no se invierte ya en almacenamiento de energía y fuentes renovables, veremos colapsos de red globales en esta década”.
¿Cuándo podría ocurrir el próximo gran corte de luz?
Aunque no dieron una fecha exacta, ambos referentes tecnológicos coinciden en que el riesgo se intensificará hacia finales de esta década, especialmente entre 2027 y 2030. Este pronóstico no implica que el mundo entero quede a oscuras al mismo tiempo, pero sí que podría haber apagones sincronizados en distintas regiones clave, afectando bancos, hospitales, sistemas de transporte y comunicaciones.
Las causas detrás del posible apagón mundial.
Entre los factores que podrían detonar una falla masiva en el suministro eléctrico se encuentran:
. El aumento del consumo energético por tecnologías emergentes.
. El cambio climático, con olas de calor y tormentas extremas que ponen en jaque las redes.
. Los ciberataques a infraestructuras críticas, cada vez más frecuentes y sofisticados.
. La falta de inversión en redes inteligentes y sistemas de respaldo.
Según Gates y Musk, la clave está en actuar ahora. Invertir en energía solar, eólica, baterías de almacenamiento y modernización de redes eléctricas es urgente. Además, recomiendan a los gobiernos y empresas priorizar la ciberseguridad energética y preparar planes de contingencia ante apagones prolongados. (a24)