En China, las calles de Shanghai están vacías con la gente en sus casas. Hay 25 millones de residentes confinados en una cuarentena prolongada. ¿Por qué hay una ola de contagios en China y cuál es la estrategia?.
Una vez más, las calles de Shanghai están vacías con la gente en sus casas. La historia se vuelve a repetir. Se trata del confinamiento de la ciudad más grande de China que ya va por su segunda semana.
Sus habitantes ya están cansados y enojados. «Queremos comer, queremos ir a trabajar, queremos tener derecho a saber», gritan en alguno de los videos que se difundieron en las redes sociales. Un dron con un altavoz atado se acerca a las zonas residenciales con un pedido. «Por favor, cumpla con las restricciones de Covid. Controle el deseo de libertad de su alma. No abra la ventana ni cante».
En estos momentos, son más de 25 millones de residentes a los que le comunicaron que la cuarentena es indefinida. Son más de 130.000 las personas infectadas desde el 1° de marzo. en un país que estaba libre de casos de coronavirus.
La indignación de los habitantes crece día a día en China y son muchos los vecinos que se descargan en las redes sociales con fuertes descargos. Muchas de ellas circulan por Weibo, el Twitter chino.
La estrategia de China se debe a la variante Ómicron. Por el momento, en China no se permite hacer la cuarentena domiciliaria en caso de ser positivo. En las imágenes se ven largas filas en centros de aislamientos como hoteles y estadios. En total, hay más de 47.700 camas disponibles para pacientes con síntomas leves o asintomáticos.
Quejas por falta de comida y suministros
Otra queja de los habitantes de Shanghai es la falta de comida. Muchos residentes protestan porque se están quedando sin alimentos. Las reglas estrictas obligan a la gente confinada a hacer compras a través de distintas aplicaciones a través del celular. Sin embargo, esto terminó de colapsar a los servicios de entrega y las páginas de las casas de comida.
La distribución de agua, verduras y distintos alimentos que las autoridades locales se comprometieron a entregar no alcanzan. «Es cierto que existen algunas dificultades para garantizar el suministro de las necesidades diarias», dijo Liu Min, subdirector de la Comisión Municipal de Comercio de Shanghai.
En las últimas horas, Shanghai reportó casi 20.000 nuevas infecciones de Covid-19, estableciendo un récord diario por séptimo día consecutivo desde que el centro económico de China cerró sus puertas la semana pasada. La gran mayoría de los positivos durante el último brote son asintomáticos.
¿Por qué hay una ola de contagios en China y cuál es la estrategia?
Desde el comienzo del brote, la cifra de infectados con síntomas supera los 3.000. Fu Chen, director del Centro de Shanghai para la Prevención y el Control de Enfermedades, explicó que esto se debe a las altas tasas de vacunación, los rasgos menos agresivos de la variante Ómicron virus y el hecho de que los casos se detectan temprano debido a las pruebas masivas que hay en China.
La ola de contagios no creció la tasa de muertes. Al menos, según las cifras oficiales. Después de más de un año sin reportar ningún fallecido, hace dos semanas las autoridades informaron dos nuevas personas fallecidas. En China viven más de 1.400 millones de personas. Oficialmente han muerto 4.638 por coronavirus.
La tasa de vacunación en China ronda el 90%
Si bien la tasa de vacunación de China ronda el 90%, los sueros chinos con virus inactivados se consideran más débiles que las vacunas de ARNm, como las producidas por Pfizer-BioNTech y Moderna, que se usan en Occidente. Este punto hace dudar a algunos expertos extranjeros de que las cifras de fallecidos reportados en China se ajusten a la realidad, sobre todo cuando las tasas de vacunación entre los ancianos son mucho más bajas que las de la población en general, con solo alrededor de la mitad de los mayores de 80 años completamente vacunados.
En territorio chino el actual epicentro de contagios está en Shanghai. En la ciudad se han instalado alrededor de 20.000 puntos de recolección de muestras. Todos los residentes pasan por varias rondas de pruebas PCR. Desde otras partes de China, han llegado más de 10.000 sanitarios para ayudar en esos testeos masivos, incluidos 2.000 militares del personal médico del ejército. (a24.com)
