El 90% de las firmas hilanderas del país paralizó la actividad por bajas ventas

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Ante la crisis en la que se halla el sector textil, como consecuencia de la marcada caída de las ventas, debido a la competencia de productos importados a menor precio, la hilandería y desmotadora de algodón Emilio Alal, de Goya, anunció esta semana la paralización de la actividad y las vacaciones para todo el personal. Uno de sus propietarios Jorge Eduardo Alal, reconoció que el 90 por ciento de las hilanderías del país atraviesa por una crisis semejante a la que se siente en la planta de Goya, debido a la importante disminución de las ventas. Sesgún explicó, todo esto ocurre como consecuencia de la acumulación de stocks, que vinculó con una tendencia que se observa en todo el sector textil. Y aseguró que la mayoría de las fábricas están paralizadas, con medidas de distintos tipos. Además, reiteró que en la planta goyana no habrá despidos ni retiros voluntarios. La hilandería suspenderá sus actividades desde el próximo lunes, que es cuando comenzará el período de vacaciones pagas del personal. Y está previsto retomar las tareas el próximo 28 de febrero, según un comunicado oficial de la empresa fabril, tras un acuerdo arribado con el sindicato que agrupa al sector, y el que implica la reducción del sueldo al 70 por ciento del personal. “No somos los únicos, es como que somos los últimos en adoptar estas medidas, hay un montón de hilanderías, diría el 90 por ciento del aparato productivo hilandero argentino está paralizado con medidas de distinto tipo: algunos han cerrado plantas, cesanteado personal, suspendido, achicado personal. Nosotros no, nosotros vamos a dar las vacaciones, se puede postergar el inicio de actividades un mes más y ahí arrancaremos”, recalcó Alal a un medio goyano. Cabe señalar, que son más de 300 familias las alcanzadas por esta medida. Por otra parte, a la mayoría del personal que trabaja en la planta, debido a su antigüedad (la textil tiene 22 años de vida), le corresponde 28 días de vacaciones. En este sentido, el empresario manifestó: “No hay demanda del producto y el sobre stock que tenemos es muy elevado, hemos llegado a dos meses y no hay lugar para poner nuestros productos y, como se acerca el momento de las vacaciones, tenemos que dárselas pagas a nuestro personal”. Por otro lado, ratificó que no corren peligro los puestos de trabajo y expresó su expectativa de que el año 2017 será mejor para las economías regionales.s