La Unión Cívica Radical (UCR) apuntó contra los seis legisladores que fueron a Ezeiza a entrevistarse con los represores condenados por delitos de lesa humanidad.
La Unión Cívica Radical salió a repudiar este miércoles la visita a un grupo de represores, entre ellos Alfredo Astiz, que realizaron seis diputados de La Libertad Avanza.
El partido que preside el senador Martín Lousteau se manifestó mediante un mensaje en redes sociales en el que advirtieron que los legisladores que fueron a la cárcel de Ezeiza «deberían tener conciencia».
«Visitar a genocidas y la charla amena con quienes violentaron los derechos más básicos de la ciudadanía es una afrenta a víctimas, familiares y a todo el pueblo argentino que decidió hace 40 años vivir en democracia y al amparo de la Constitución», completaron.
La iniciativa, que provocó un fuerte enojo dentro de la bancada oficialista en la Cámara Baja, surgió de un grupo conformado por Beltrán Benedit, Guillermo Montenegro, Alida Ferreyra, Lourdes Arrieta, María Fernanda Araujo y Rocio Bonacci. La visita al penal de máxima seguridad de Ezeiza ocurrió el pasado 11 de julio y se conoció el martes a última hora.
Además de Astiz, los represores que recibieron a estos diputados de La Libertad Avanza fueron Raúl Guglielminetti, Carlos Suárez Mason. Antonio Pernías, Gerardo Arráez, el “Pájaro” Martínez Ruíz, Agustín Oyarzábal Navarro, Juan Manuel Cordero, Mario Marcote, Miguel Angel Britos y Adolfo Donda. Todos ellos condenados por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico militar.
El argumento que dieron cuando el resto de los diputados del bloque se enteró de esta visita fue que se trató de una visita «a todos los presos mayores de 70 años».
Lo cierto es que la gran mayoría de los presos que superaron esa edad y cumplen su condena en el penal son los que cometieron delitos de lesa humanidad y no pudieron acceder al beneficio de la prisión domiciliaria. (mdzol.com)