LAGUNA NAINECK: «Ayuda urgente»: 350 productores sufren una catástrofe productiva

150

 

Se trata de pequeños productores de banana y otros cultivos que trabajan en sus fincas en Laguna Naineck, en la provincia de Formosa, donde hace más de tres meses que no llueve.

«Catástrofe productiva». Con ese título, la Federación Agraria Argentina (FAA), filial Laguna Naineck, en la provincia de Formosa, publicó un duro y revelador video, donde reflejó el angustioso momento que viven unos 350 pequeños productores de bananas y de otros cultivos por la eterna sequía que los afecta.

«Enero, febrero, marzo del 2024, la sequía, el sol intenso y las altas temperaturas causaron daños y destruyeron nuestros cultivos, dejando las plantas quemadas. Y, en algunos casos, destruyéndolas en su totalidad», dice el posteo en la introducción.

Luego, con música de fondo, el video, que se reprodujo por redes sociales para lograr mayor difusión, muestra una serie de fotografías con el estado desastroso en las que se encuentran las plantaciones y los cachos de bananas. También se puede ver a los agricultores junto a sus cultivos.

«Pedimos la declaración de emergencia agrícola. Ayuda urgente mediante un aporte no reembolsable para todos los productores damnificados de Laguna Naineck», reclamaron.

LA SITUACION

«La importación de bananas siempre estuvo liberada. Pero esta legalización del gobierno nacional nos pone en la puerta de una crisis terminal que pensamos que nunca iba a llegar». Luego de que el ministro de Economía, Luis Caputo, anunciara la liberación de la importación de alimentos de la canasta básica e incluyera a la banana en el primer lugar de la lista, Pánfilo Ayala, delegado de la Federación Agraria Argentina (FAA), filial Laguna Naineck, en Formosa, señaló que, si bien nunca la banana extranjera estuvo restringida para ingresar al país, con esta medida del Gobierno los productores de esa zona quedarán al borde de desaparecer.

«Siempre hubo descontrol porque se miró solamente a los importadores, nunca al productor local. Pero ahora, de manera oficial, el Gobierno decide soltarnos la mano y nos empuja a desaparecer directamente. Es destructivo lo que están haciendo. Se está haciendo realidad lo que venimos presagiando: la desaparición de la banana como producto argentino».

En la actualidad, en la región solo quedan algo más de 1000 hectáreas con 350 productores, cuando en la década del 80 había más de 12.000. «Es increíble que tomen medidas que quitan impuestos a la importación y nos sigan apretando y poniéndonos el pie encima a los productores argentinos que pagamos impuestos. No se puede creer el desconocimiento de los funcionarios para tomar una medida sin tener en cuenta lo que se produce en el país y lo que nos cuesta hacerlo. Esto nos perjudica y nos daña aún más. Somos pequeños agricultores que estamos lejos de los centros de comercialización, de los puertos, con el valor del combustible más caro. Así se torna imposible sostener cualquier producción», dijo.

En la actualidad, en la región solo quedan algo más de 1000 hectáreas con 350 productores, cuando en la década del 80 había más de 12.000gza.

Detalló que, desde hace tres décadas, el Senasa busca proteger a las producciones locales a través de una medida cuarentenaria mediante la prohibición del ingreso de banana extranjera en provincias productoras, Salta, Jujuy, Misiones y Formosa.

«Pero, por lo menos acá en Formosa estas prohibiciones nunca fueron cumplidas y son violadas constantemente. Desde siempre fue una competencia desleal para el productor local que nos llevó a un retroceso productivo inmenso. De las 20.000 hectáreas que pudimos tener en la Argentina hace cuatro décadas atrás, hoy quedamos reducidos a 5000 hectáreas totales», añadió.

En este contexto, contó que, por si fuera poco, la sequía que viene de tiempo atrás, aun no ha cesado en la zona y las últimas lluvias ocurrieron en diciembre pasado. En mayo próximo comenzará la cosecha que concluirá en septiembre inclusive, pero ya advirtió que esta no será buena: «Está totalmente comprometida la producción este año. La seca y el extremo calor pone en peligro no solo la calidad de la fruta, sino también la cantidad».

«Políticas públicas diferenciadas para la producción local, regulación del ingreso de banana extranjera en época de cosecha local y que solo se importe lo que hace falta, precio mínimo de referencia para la banana local en armonía con la oferta para que la brecha entre el consumidor y el productor sea menor, garantizando la rentabilidad y sustentabilidad de la producción nacional», enumeró.

Por último, remarcó que lo que están pretendiendo es «de forma urgente» hablar con las autoridades nacionales de la producción para revertir esta medida del Ejecutivo. «Necesitamos que el gobierno nacional, a través de la política, sea la garantía de nuestra existencia. Aunque las primeras medidas ya nos están demostrando que no hay voluntad política de proteger la producción de las economías regionales», finalizó.

Para el dirigente, existen varias cuestiones que son fundamentales para que no suceda la desaparición de la actividad. Por un lado, que haya un precio mínimo de referencia y, por el otro, que se ejecute un fondo nacional bananero que sostenga la producción local. Según detalló, el consumo anual de banana en el país es de 500.000 toneladas y la capacidad productiva nacional se ubica en 150.000 toneladas anuales.