Las diferencias en el gobierno nacional entre «albertistas» y «kirchneristas» es cada vez más profunda. Formosa no está ajena a las divisiones. El círculo cercano a Gildo Insfrán cuida con mucho recelo los espacios de poder logrados en los últimos años y ahora enfrenta «a los que tienen votos y hace mucho esperan su momento».
“Es una interna entre funcionarios de escritorio y dirigentes de la calle” comentó un “descarriado” que no comulga con el “gildismo de paladar negro” que pulula en la vidriada Casa de Gobierno.
“La unidad es la palabra salvadora”, pero si hay Ley de Lemas, se permiten. “pelear para hacer más gatitos, reproducirnos”, dijo Insfrán.
“El gobierno de Alberto no es bueno, lo escuchamos todos los días en los barrios. Nosotros tenemos que poner la cara y llevar un paquete de fideos o polenta, mientras los funcionarios de escritorio no atienden los teléfonos. Aparecen solo en tiempos de campaña” agregan ofuscados.
“Para colmo, nos tememos que bancar ver a sus hijos exhibiendo toda la plata en redes sociales, en camionetas que le compran sus papis o viajando por el mundo. Nos estamos alejando de la gente. Nuestros votantes no son estúpidos, ven todo. El año pasado volvimos a perder la capital y seguimos insistiendo con pelear con Jofré” acotó; “qué podría pasar si el ingeniero ‘juega por afuera` o se suma la oposición?. Y si se suma el siempre díscolo Celauro?”.
REALIDAD MATA RELATO
Las clases sociales en Formosa están cada vez más diferenciadas: “los gildistas” o cercanos al poder y “los formoseños comunes: los Juan Pueblo”.
“Los medios de comunicación, hoy más que nunca: son medios, nada más. Los verdaderos protagonistas son los comentaristas y seguidores. Aunque en la credibilidad del sitio juegue un papel importante. El dirigente que los quiera controlar, se equivoca”.
En la calle vez poderosas camionetas y barrenderos que limpian las calles por dos mangos, a metros de un contenedor de basura donde muchos “sacan provecho” de los residuos de los ricos. “Y en muchos casos, con remeras de candidatos que hasta ayer recorrían los barrios”.
A propósito: en qué cambió la vida de la gente “con la llegada al Concejo Deliberante de Marcelo Sosa?, el hombre que venía –como un Mesías- a cambiar todo a favor del pueblo?”
No hay que ser filósofos para notar esta realidad en nuestra ciudad. Es sentido común.
CARAS BONITAS EN REDES SOCIALES, NO LLENAN LA OLLA
Mientras tanto, con la campaña electoral del 2023 en marcha, el propio Insfrán admitió el inicio del proceso hacia las urnas en un acto desarrollado en Potrero Norte, el 2 de marzo pasado, ya salieron los primeros pre candidatos: el concejal “Cacho” García quiere el sillón que Jofré ocupa desde el 2015. También el diputado provincial “Quique” Ramírez recorre los barrios con miras al llamado a las urnas del año entrante.
Los “gildistas”, desde las sombras, ejercen más oposición al intendente capitalino que los radicales “a cara descubierta”.
LOS ETERNOS VS DIRIGENTES CON OLOR A PUEBLO
La interna que separa al gobierno de Gildo está centrada entre “los eternos” y “los dirigentes, con poco peso, pero con olor a pueblo”.
Le dicen “Los eternos” a funcionarios “ya canosos o con escasez capilar” que pretenden reciclarse en redes sociales. Allí, comprenden que a los usuarios de Facebook, Instagram, Twiter o Tik Tok no lo van a seducir solamente con una cara bonita o una amplia sonrisa.
La interna del oficialismo en la ciudad capital cumple función electoral con la Ley de Lemas evitando la fuga de los díscolos. Pero se extiende más allá del período proselitista. Desde que el quinto piso quieren “sacar” a Jofré de la intendencia. Está claro.
Las nuevas generaciones cambiaron, evolucionaron. Los medios tradicionales –sin interactividad con lectores, oyentes o televidentes- pierden vigencia.
STATUS QUO
En medio de la interna, Gildo Insfrán continúa apostando al status quo. Como siempre. Realiza cambios que no cambian nada. Solo nombres, no políticas. Debería hacerlo?. Y, quizás no. Le funciona desde el 10 de diciembre de 1995, hace 26 años y tres meses. Por aquel entonces, Messi tenía 8 años y José Mayans tenía acumulados –como el 10 del PSG- 8 años, pero de antigüedad como diputado provincial.
Ejemplo de ellos es el polémico, y mediático ministro “de la pandemia” Jorge González. Un eterno, elegido por “el dedo”, designado. Diferentes son los “eternos” que superan la instancias de las urnas cada años años.
En el 2007, organizaciones de DDHH obligaron el alejamiento de Lorenzo Elvio Borrini y fue reemplazado por un asesor legal del Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (ENDEPA): Jorge González (amigo de Félix Díaz).
Cumplió durante meses el guión que recibía de una oficina contigua a la suya y se mantiene “tranqui” –gracias a la ley no escrita de status quo- en su cargo de ministro de Gobierno, Seguridad, Justicia y Trabajo. Cargo que asumió en el año 2007. Se desempeña en el cargo hace 14 años y 4 meses.
“La única verdad es la realidad” dijo el general.
“Al que le quepa el sayo”……..
Juan “Coco” Altamirano (noticiasformosa.com)
